Frikis, reuníos!

El mundo es de los frikis. Todo el mundo lo sabe, pero prefieren ignorarlo y continuar con sus vidas, familias, hipotecas, convencionalismos sociales y lobotomías varias. Ellos disimulan, nos miran de reojo, con recelo. Saben que lo sabemos. Tenemos el control... de nuestras mentes, que ya es pedir mucho.

lunes, 31 de marzo de 2014

Witchcraft: el juego de rol perdido y hallado en el templo

Y el otro día va EDGE y reimprime Witchcraft. Así, a pelo, sin vaselina. De flipar. La verdad es que había gente que lo pedía, unos tres o cuatro frikis. Pero por alguna razón incognoscible este juego (juegazo) vuelve a estar en las estanterías. A ver si al final vamos a criticar a EDGE por sacarlo de nuevo. Pues no.

Witchcraft, como decía antes, es un juegazo de cagarse en las bragas. Es la versión adulta de Vampiro la Mascará, el Drácula de Bram Stoker comparado con la saga de Corpúsculo. Directo, sin morralla, con un sistema sencillo que incluso permite jugarlo con cartas, CON EL TAROT, repleto de magia, de crímenes, de cultos inombrables... De todo.

Entorno compacto, personajes perfectamente complementados sin que mires al de al lado y digas "y que cojones hace el Ventrue este en este pollo que tenemos montado aquí". Si amigos, sé que me estoy jugando una vela negra con los vástagos del Mundo de Tinieblas, pero es que Witchcraft es un juego de verdad. Lo "otro" es una cosa molona para salir de bares y ponerte ropa de malote depresivo.

La pena es que Eden Studios, los que desarrollaron el sistema de Witchcraft (y el All Flesh Must be Eaten) no haya reventado bien y parezca que esté a punto de desaparecer. Hace tiempo estuve investigando que fue de C.J Carella, el creador del mundo de Witchcraft y resulta que el chaval abandonó todo lo del rol y se retiró a trabajar en una empresa de video juegos porque "había que pagar las facturas". Una pena porque este si que sabía lo que se traía entre manos... Y no me refiero al texto en si, si no en buena parte al tratamiento de lo Mágico (en mayúsculas) que se destila en el libro.

Con unas maravillosas ilustraciones, especialmente sugerentes las de RK Post, ilustrador de magic, y que dibujó algunas de las más inquietantes viñetas que yo he visto en el mundo del rol, hasta la tipografía de las letras y la hoja de personaje destila estilo, magia y oscuros secretos. A destacar la entrada a los capítulos, toda una colección de historias extrañas, de ganchos que por un lado dan miedito y por el otro te dicen "juégame".

Comparativa entre las dos ediciones. Fotografia procedente del blog Runequestredux.blogspot.com

 

Bien, pues casi nada de esto aparece en la nueva edición de EDGE. Quizás no sea esto importante, pero para mi si lo es. Eso si, el libro aparece "limpito", ordenado y con una letrita que parece el prospecto de la fluoxetina. Lo mejor es que cuesta 20 pavetes, motivo más que de sobra para ir a toda leche y comprarlo.

Eso si, yo me quedo con el de la primera edición, un libro que tengo al lado de uno de Aleister Crowley y otro de Eliphas Levi.

 

- Hola mire, que vengo a hablarle de satán, nuestro señor

- pues ya estás tardando

 

jueves, 13 de marzo de 2014

INKSIDE: sobre las cosas bien hechas, los cómics y los complejos.

Recordaba estos días aquella noticia que saltó a los medios de comunicación sobre que "unos españoles" ganaban "unos premios importantes" en el "mundo de los cómics". Si amigos, las comillas resumen la noticia que fue, dejando a un lado la gracieta, más o menos comentada así. Y es que es difícil hablar de determinadas cosas en España (también conocida como "este país") cuando no se tiene ni puta idea y sobre todo si es en un telediario o noticiario o cómo se diga eso. Aquí es salirnos del fútbol, de si hace frío en invierno y calor en verano, de lo que caga la Pantoja y de lo bien que juega la roja (y rima) y perdemos los papeles en medio de sonrisas bobaliconas y noticias colocadas en la sección "anécdotas estúpidas del mundo". Me refiero a los premios Eisner otrogados a los creadores de Blacksad y a David Aja por su trabajo en Ojo de Halcón. Corría el mes de Julio de 2013, como diría el nunca lo suficientemente pesado César "yosemuchodecristo" Vidal...

El colmo de la estupidez se lo llevó Telemadrid y su página web, dónde, siguiendo con el ideario tardo franquista rajoyniano, se hablaba de los galardones no en función de los galardonados o del medio visual del tebeo, sino en función de su importancia "para la mayor gloria de la Marca España", tan en boga por aquellas fechas pero ya olvidado, entre otras cosas porque no nos hace falta: recuerden que somos la envidia del planeta.

El titular de los imbéciles de Telemadrid era, si no recuerdo mal, "España se quita los complejos en el mundo del cómic". Hay que ser tonto. No te puedes quitar un complejo si nunca lo has tenido, pensé mientras veía un cómic de Iron Man dibujado por Salvador Larroca y premiado con un Eisner... en 2009.

Lo peor de todo no es el tema de los premios o no, es la lástima que sentimos los que nos hemos criado con los dibujantes españoles en las revistas hispanas, cuando vemos que es en el extranjero dónde nuestros magníficos artistas obtengan reconocimiento y que en España es imposible que alguien comente una noticia sobre el noveno arte con un poco de dignidad y orgullo. Y que ese reconocimiento se lo den fuera de aquí. Y que también les den sueldo. Recuerdo haber aplaudido cuando leí la carta de Juan Díaz Canales, el guionista de Blacksad, diciendo a los de la marca españa que se olvidaran de él. Y recuerdo ver como muchos le ponían a parir por decir eso... En fin, país de caca...

El caso es que es un honor tener a estos genios entre nosotros. Entrevisté, cuando trabajaba para la revista Generación XXI, hace muchos años -allá por el 2000- a un triunfante Carlos Pacheco y tuvimos una conversación sobre muchas cosas pero recuerdo la ilusión de estar allí con ese tipo tan cercano, y pensar "joer, y éste tipo se está comiendo los USA, y aquí no hay sitio para él". La situación no ha mejorado, al contrario, se ha ido a tomar por culo, ese mundillo, el de los cómics publicados aquí con gente de aquí, y tantos otros. Por cierto, todo esto comenzó en pleno "España va bien".

Bueno, pues en realidad todo lo anterior es para recomendaros una revista: INKSIDE, de la que ya hay varios números por ahí, pero en especial este especial sobre autores españoles en el comic norteamericano.

¿Porqué deberíais comprar esta revista? Porque está muy bien hecha. Porque habla de gente de nuestro país con talento. Porque vienen los bocetos originales de los artistas. Porque las entrevistas son buenas y porque esta gente tiene cosas interesantes que decir. Y porque me parece la mejor publicación sobre el género que he visto en España. Reconozco, eso si, que no soy un especialista en la materia, pero soy pobre, y cuando eres pobre reconoces lo bueno rápido. Y esta revista es buena. Muy buena.

¿Inconvenientes? El precio, sin duda. Este especial vale diez euros, (buena relación calidad precio) y sus hermanas (al menos el número dos) cuesta 15€, con información en general y también muy buenos acabados.

Producto muy recomendable, la verdadera marca España, esa que siempre tuvimos a pesar del español medio, nuestras envidias y nuestros complejos.